La tragedia del Chapecoense está latente todavía. Pasó poco más de un mes desde que el avión que llevaba al equipo brasileño a jugar la final de la Copa Sudamericana se estrelló en Medellín. Y por eso este viernes por la noche Belgrano eligió bajarse de una aeronave ante un desperfecto eléctrico.
El Pirata estaba por volar a Chile para realizar la pretemporada, cuando antes de despegar el aparato se apagó por completo. Luces, turbinas, todo. Se quedaron completamente a oscuras. Y así lo contó el DT del equipo, Leonardo Madelón, en TN Deportivo.
“La salida era a las 20.55 y se demoró una hora. Después estuvimos quince minutos más arriba del avión, y cuando va a salir hay un corte eléctrico total. Se apagaron las turbinas, todo. Quedamos a oscuras unos dos minutos, no hubo comunicación. Vuelve la luz otra vez y a los tres minutos se corta todo de nuevo”, explicó el entrenador.
Y después relató cómo se sintieron los jugadores y el plantel: “Hay un trauma con lo que pasó hace poquito con el Chapecoense. Los jugadores empezaron a recibir mensajes de sus familias para bajarse. Me agarró temor porque no hubo una buena explicación de lo que pasaba, se puso muy tenso todo. Los demás pasajeros nos miraban como diciendo ‘bájense, por favor’. Optamos por bajar”.
El avión finalmente despegó y llegó a Chile sin novedades, pero el plantel de Belgrano no quiso correr el riesgo y se quedará haciendo la pretemporada en Córdoba.