En solo un segundo, ese segundo fatal en el que el teléfono resbala de la mano o del mueble en el que estaba apoyado y cae. La pantalla de smartphone estalla en mil pedazos.
Levantarlo para ver qué ha sucedido supera el suspenso de cualquier thriller de terror y ver el vidrio hecho astillas o quebrado al medio es un momento de desolación más triste que la separación de los enamorados en el cine.
Para reducir el drama de estas situaciones, existen maneras de proteger la delicada pantalla del móvil.
CUBIERTOS EN PLÁSTICO
Parecidas al contact (tanto que incluye la casi imposibilidad de colocarlas sin que queden burbujas) estas láminas plásticas pueden proteger la pantalla de rayones y no mucho más. Aunque también pueden servir para el día después. ¿Qué quiere decir? que si tu teléfono se cae y se rompe, pero el display sigue funcionando, usar una de estas láminas podría ser el equivalente del “atarlo con alambre” y permitirnos usar el teléfono a pesar del vidrio astillado. Eso sí, habrá que hacer malabares para leer el texto en la pantalla. En Mercado Libre estas láminas se consiguen para varios modelos de teléfono por menos de 40 pesos.
TODO DEPENDE DEL CRISTAL CON QUE SE MIRA
Un paso más en la protección son los vidrios o cristales templados que están hechas de un material rígido, que aunque engrosa un poco el teléfono, también lo protege un poco más. Son realmente fáciles de colocar y prácticamente no se nota que están puestos. No son infalibles pero resisten bastantes golpes. Pueden encontrarse en Mercado Libre por algo así como 200 pesos o aprovechar que está disponible el puerta a puerta y buscar más modelos en Amazon.
QUE EL PROTECTOR NO TAPE EL BOSQUE
Más allá del tipo de protección por el que se opte, siempre hay que buscar el adecuado para no tape los sensores como el de proximidad, y que no interfiera con el apagado automático de la pantalla.
DE CAPARAZONES Y EXOESQUELETOS
Las carcasas son una manera eficiente de protección, pero generan cierta incomodidad, además de tapar el diseño del teléfono que tanto nos costó elegir, sobre todo las que cubren totalmente el teléfono. Muchas marcas ofrecen modelos oficiales para los distintos teléfonos y esas suelen ser las más recomendables.
Pero la relación es directa: para lograr más protección la funda deberá ser más gruesa. Hay que encontrar el equilibrio entre que el equipo sea esbelto y que se rompa con un golpecito, y que sobreviva una bomba atómica, pero se sienta cómo llevar un lavarropas en el bolsillo.
TELÉFONO EN BOLSA
Las fundas son todo un mundo. Algunas son más de adorno que otra cosa, pero en general ofrecen cierta protección sobre todo cuando el teléfono hace piruetas indescriptibles para terminar cayendo de punta o de canto al piso. También existen modelos oficiales. Las de tapita suelen ser bastante incómodas, sobre todo para sacarse una selfie.
CON PROTECCIÓN INCLUIDA
Para no tener que andar agregando cosas, Motorola sacó dos modelos de teléfono que ya vienen equipados con vidrios extra resistentes. Se trata de los Moto Z Force y Moto X Force. Ambos están equipados con un cristal irrompible con tecnología ShatterShield (vidrio Gorilla Glass en el caso del Moto Z base), que evita su fractura en caso de golpe o caída. De hecho, las pantallas tienen cuatro años de garantía contra golpes y rayones. Por ahora sólo se venden en EE.UU.
Las miradas siempre están puestas en Corning, la compañía que hace el vidrio Gorilla Glass, que protege las pantallas del 90 por ciento de los teléfonos del mercado. La versión 5 resiste caídas desde un metro y medio en el 80% de los casos, según la compañía.