Una declaración de Marcelo Barovero se transformó en tema del día de ayer cuando en una entrevista que concedió en México le preguntaron de qué equipo del extranjero era simpatizante y no mencionó a River. Su respuesta abrió un debate intenso y hoy, lejos de aclarar el tema, el arquero brindó una nota en la que profundizó la polémica: “He pasado muchos golpes bajos en mi etapa en River, esto debe ser una cosa más”, dijo el hoy arquero del Necaxa en diálogo con Radio El Espectador de Rafaela.
Trapito es acaso el jugador más emblemático de la etapa más brillante del River de Gallardo que volvió a conquistar el plano internacional con el summum en la Libertadores 2015. Su penal atajado a Emmanuel Gigliotti en la semi de la Sudamericana 2014 lo transformó en héroe y su figura es venerada por los hinchas. O al menos lo era hasta sus dichos de hace pocas horas y su aclaración, que en realidad pareció complicarlo más.
A lo dicho, agregó: “Tratan de generar alguna noticia con cualquier cosa que pasa. He convivido cuatro años en un club enorme y lo que siempre se busca es algún detalle para tratar de dividir o confrontar y la verdad que no recuerdo que lo haya dicho de esa manera pero está de más aclarar lo que uno siente por cada institución por donde ha pasado. Para mí el respeto es el mismo por cada club por donde he pasado, por Atlético, por todo lo que me ha dado, y lo de River está de más aclarar”.
Y en esta instancia señaló luego: “Estoy agradecido de haber jugado en un equipo grande, de todo lo que me dio River, de haber jugado en un equipo grande que no te da ningún otro equipo”.
La vida que extrañaba
Cuando Marcelo Barovero confirmó que se iba de River, la noticia causó impacto. El arquero no sólo era figura sino que se había asegurado su trono como ídolo. Pero la locura del fútbol argentino lo empujó a tomar la decisión de cambiar de aire, de lugar, de irse a miles y miles de kilómetros en busca de tranquilidad.
Desembarcó en la ciudad mexicana de Necaxa para defender los colores del club homónimo y allí sí que encontró lo que necesitaba. “Es una de las tres localidades con mejor calidad de vida del país, le han dado el galardón de ciudad más limpia del continente, hay mucha infraestructura, los traslados son simples y muy rápidos. Estoy muy contento acá, en líneas generales volví al ritmo de Rafaela y estamos felices con mi señora y mis hijos, disfrutando”, describió.
En este sentido, el arquero refrendó su decisión: “Me han pasado muchas cosas en los últimos años en la parte deportiva y he tomado la decisión de hacer un cambio bastante raro para todos los que lo miran desDe afuera pero mi decisión era firme hace mucho tiempo. Estoy contento de haberlo hecho y con el tiempo veré si fue correcta o no pero por ahora estoy muy feliz y tranquilo por todo lo que me está dando el fútbol desde que me tocó arrancar en Atlético”.
No más locura para Trapito, entonces, que destacó: “Para muchos puede ser raro pero uno sabe que la vida no es sólo fútbol. Estoy en un club que no es de los grandes aquí en México, se vive muy distinto el fútbol a como se vive en Argentina, es mucho más respetado y valorado el juego y a la hora de ir a la cancha se lo toma más como un espectáculo, una salida y no una descarga emocional, ahí está la diferencia”.