En 2011, Mariano de la Canal (29) alcanzó popularidad al colocarse una vincha fucsia con el nombre de Wanda Nara para alentarla en el Bailando: con su llanto desconsolado y sus alaridos en la tribuna de Marcelo Tinelli cada vez que pronunciaban el nombre de su ídola, el joven -en ese momento desconocido- se ganó el apodo por el que aún se lo reconoce en el medio: El fan de Wanda.
En ese entonces, Mariano lucía su rostro sin retoques estéticos, pero no estaba conforme con sus facciones. Tanto que decidió ponerse en manos del cirujano Aníbal Lotocki para hacerse una Bichectomía para reducir el tamaño de sus mejillas: “Gente, estoy súper hinchado… ¡¡¡tiene que bajar mucho!!! Yo estoy feliz. Voy a quedar con la cara flaquita, ya que todos criticaban mis cachetes”, anunciaba De la Canal en Twitter tres años atrás, con la foto de su rostro recién intervenido.
Sin embargo, Mariano no quedó cien por ciento conforme con la imagen que le devolvía el espejo y volvió a pasar por el quirófano para retocarse la nariz y quitarse las bolsas que se forman debajo de los ojos. Además de ejercitar su cuerpo para adelgazar. “Estoy cansado de que me digan gordo…Me operé para no sentir más el acoso de la gente que te dice: ‘sos feo, sos lindo o sos gordo’. Eso es tremendo, y más en este ambiente, que se labura mucho con la imagen. A mí las críticas me pesaban y me lo quería hacer”, manifestaba “el fan de Wanda”, y hoy luce con orgullo y felicidad su nuevo cuerpo y cara en las redes sociales y en Bolivia, país al que viajó para trabajar en Cantando por un sueño.
