A raíz del caso de la modelo Raquel Mancini, quien sufrio una descompensación por una estricta dieta de alimentación, la lcienciada en nutrición Andrea Rochaix dijo a Télam que “las mujeres viven muy obsesionadas para llegar a un cuerpo ideal, y es solo eso, un ideal”.
“No hay que inculcarle a las personas el peso ideal al que muchas veces no se puede llegar y mucho menos mantener”, reveló Rochaix.
La especialista detalló que “científicamente no tiene sentido, no logramos nada poniéndonos bajo esos regímenes estrictos y esas dietas que nos venden, y que solo sirven para sumar fracasos” y añadió que las dietas mágicas “conllevan algo rígido y estricto que no tendría que existir, ya que todo lo que no se adapte a nuestra vida normal no funciona”.
“Tenemos que buscar una comida amigable desde todo punto de vista, que nos haga bien a los sentidos, que además nos produzca placer, porque cuando buscamos perder kilos no tenemos que perder el placer de comer y el placer que nos deja la comida, y sobre todo evitemos totalmente las dietas”, concluyó.
Por su parte, la directora del centro de estética AnyBodyArgentina, Sharon Haywood, dijo a Télam que “la belleza que vemos en todos lados, solo la pueden lograr un 5 por ciento de las mujeres a nivel global por lo que el otro 95 por ciento estaría sufriendo por lograr un cuerpo como el que venden a través de las publicidades, que están retocados con photoshop y no son reales”.
Además, señaló que “con el boom de internet, el consumo de esas imágenes, sin darnos cuenta, afecta la autoestima de las chicas y las mujeres, principalmente, y puede contribuir a trastornos alimenticios, también en hombres”.
“Nos venden que el cuerpo no es un lugar donde podemos disfrutar, sino que es algo que tenemos que cambiar para lograr un buen matrimonio, éxito, salud y juventud, y eso no es real”, aseguró.
Haywood destacó, además, que “entre mucha gente se ha transformado en normalidad no comer mucho y no estamos escuchando a nuestro propio cuerpo, estamos escuchando lo que dicen los demás en la sociedad sobre lo que debe ser el cuerpo, y uno no puede determinar la salud por el peso de la balanza”.
Precisó además que “todas esas mujeres y hombres que no se sienten conformes con sus cuerpos, entran a tener anorexia, atracones, bulimia y otros trastornos alimenticios que se trasladan, en muchos casos, a los chicos que están en etapa de crecimiento”.
La especialista remarcó también que “está confirmado que las la intenciones de compra subieron un 200 por ciento en las marcas de ropa con modelos de cuerpos diversos, ya que cuando las mujeres ven una modelo en relación a su edad y su contextura corporal compran y cuando ven otros tipos de modelos distintas a ellas las intenciones de compras bajan un 75 por ciento”.