Miles de personas fueron evacuadas debido a una nube tóxica provocada por un incendio en un gigantesco vertedero ilegal de neumáticos en la localidad de Seseña, a unos 30 km de Madrid. El espectacular incendio convirtió en una espesa nube negra el horizonte de la capital de España.
El incendio se declaró alrededor de la 01.20 de la madrugada y consumió tres cuartas partes de las cerca de cinco millones de cubiertas de goma amontonados en casi 10 hectáreas, la superficie de 14 campos de fútbol, indicaron los bomberos de la región de Madrid.
Las llamas, de hasta 20 metros de altura, fueron controladas con el trabajo de bomberos, helicópteros e aviones hidrantes, pero los bomberos creen que tardarán días en apagarlo del todo por la virulencia con la que arden los neumáticos.
¿UN INCENDIO CRIMINAL?
“Todo parece indicar que este desastre ha sido intencionado”, declaró el alcalde de Seseña, Carlos Velázquez, a la radio Cadena Ser, señalando que las fuertes lluvias caídas en los últimos días hacían difícil un prendimiento accidental.
El vertedero apareció en los años 1990 y no paró de crecer desde entonces. En 2003 fue declarado ilegal pero no se encontró ninguna solución para desprenderse de los neumáticos, cuya degradación natural puede durar siglos. El responsable se encuentra en paradero desconocido y acumula multas por delitos medioambientales por unos 600.000 euros.
Las autoridades regionales pidieron a los vecinos que cierren las ventanas y que informen de cualquier problema que perciban. Los componentes químicos de ese humo pueden provocar insuficiencias respiratorias, crisis de asma y neumonías, alertaron los expertos sanitarios.
