La Armada Argentina informó este lunes que la meteorología “no es óptima”, pero “no dejamos de buscar” al submarino ARA San Juan, que desapareció hace 26 días con 44 tripulantes a bordo.
“La situación es difícil para todos, principalmente para los familiares“, sostuvo el vocero de la Marina, Enrique Balbi, en la conferencia de prensa del día.
Agregó que se investiga un nuevo indicio a 700 metros de profundidad. Y ayer investigaron otro a 1.000 metros, según aclaró esta tarde la fuerza.
A casi un mes del último contacto con el ARA San Juan, todavía es un misterio qué sucedió el 15 de noviembre cuando el sumergible navegaba rumbo a su apostadero en Mar del Plata a la altura del golfo San Jorge.
“No hay indicios de un ataque externo”, reforzó Balbi hoy, para desactivar rumores que incluyeron hasta un misil inglés.
Respecto del operativo internacional de búsqueda, el vocero sostuvo que “no hay fecha tope” y que algunas naves dejan el área por reabastecimiento.
En cuanto al destino que llevaba el ARA San Juan al desaparecer, Balbi aclaró que el comandante de la nave decidió dirigirse al apostadero en Mar del Plata. La otra alternativa era Puerto Belgrano, dijo, porque otros puertos del litoral no son aptos para recibir un submarino.
Cruce al aire
La conferencia de prensa de hoy incluyó un cruce entre el portavoz naval y un periodista.
Fue cuando le preguntaron por una versión de Rolando Graña en América 24 sobre el destino de 2 suboficiales que “habrían detectado una comunicación que ustedes [por la Armada] no quieren que se sepa”.
Y agregó que Graña dijo: “Espero que uno de los suboficiales no desaparezca“.
“Para eso está la justicia”, respondió Balbi, visiblemente molesto. “Que el periodista vaya a la Justicia.”
Otros detalles
El responsable de prensa de la Marina también enfatizó que “el contacto entre el jefe de la Armada [Marcelo Srur] y la jueza [de Caleta Olivia, Marta] Yáñez es permanente”.
El último dato certero que se tiene es el mensaje final que envió por radiofrecuencia.
El comandante informó que había ingresado agua a la nave, que se había producido un cortocircuito con principio de incendio, que las baterías de proa estaban fuera de servicio y que se encontraba en inmersión, propulsándose con circuito dividido.
8 días después de esa última comunicación, la Armada confirmó que ese día se produjo un evento “consistente con una explosión”. Y una semana después Balbi admitió que ya no buscaban sobrevivientes.
Con apoyo internacional y tecnología de última generación se desarrolla desde hace más de 20 días un impresionante operativo para encontrar la nave.
El área de búsqueda, un radio de 40 kilómetros con profundidades de entre 200 y 1.000 metros alrededor de donde se registró la explosión, ya se barrió 2 veces y 7 indicios fueron descartados.
Balbi explicó que también rastrillan más al norte, siguiendo la ruta hacia Mar del Plata.
“Es como buscar un cigarrillo de 6 centímetros en una cancha de fútbol de 100 metros por 40”, comparó en una rueda de prensa.
La jueza federal a cargo del caso se mostró hasta ahora optimista en cuanto a llegar a una explicación sobre qué sucedió con el ARA San Juan.
“Manejo 2 o 3 hipótesis ─dijo Marta Yáñez a Clarín─ y no sé hasta que nivel de responsabilidad llega esto.” Mencionó al “seno de la Armada”.