El ex jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, habló del video donde se puede ver a Daniel Pérez Gadín, un contador que trabajó para la familia Kirchner, y a Martín Báez, el hijo del contratista de obra pública Lázaro Báez, contando dinero.
“No sé de que se trata, lo acabo de ver. A Báez lo vi una sóla vez, que yo recuerde. No lo conozco, no sé quién es, no sé de qué trabaja, no hago conjeturas. No tengo obligación de hablar de todo.¿Es ilícito contar plata en el país? Las explicación se la deberán dar a las autoridades de la AFIP, y en todo caso a cualquier juez o fiscal”, disparó Fernández.
Luego, aseguró: “Es una estupidez decir que robamos miles de dólares. No conocen a Cristina Kirchner, sería incapaz de robar un peso. No necesita hacer eso, conozco cómo vive, cuál es su forma de actuar”.
Sobre la citación de Bonadío por las irregularidades en el Plan Quinita, indicó: “Yo estoy convencido, tengo razón. Me procesó porque entiende que había elementos para hacerlo. Pero estoy convencido de lo que estoy haciendo. No siento que me quieran meter en cana”.
En cuanto al triple crimen de la efedrina y la fuga de los sicarios condenados a cadena perpetua, Fernández dijo: “A los hermanos Lanatta les pagaron para que digan determinadas cosas, y alguien está corrigiendo sus discursos. No me importa nada de lo que pase en la causa del triple crimen de la efedrina”.
“Nunca vi que el canal más importante del país haga un programa para cagar a un candidato. Perdí la provincia por eso. Son las reglas del juego, me arreglaré judicialmente. Me la pusieron. Hubo fuego amigo“, agregó.
“Los que tienen que estar preocupados son los que le compraron la lengua a los Lanatta. Porque estos tipos van a volver a manguear. Que se arreglen entre rufianes. Me importa un carajo qué hacen”, concluyó.
“NO SIENTO QUE ME QUIERAN METER EN CANA”
Luego, sobre la interna en el justicialismo, señaló: “El caso de Bossio es igual al de Cobos“.
También se refirió a la coyuntura económica: “La inflación actual es mucho más que la que había, 4% diciembre enero y febrero. Vamos a estar en el 40% anual”.
Y por último, describió su vínculo con Antonio Stiuso y Alberto Nisman a través de una anécdota. “Un día discutí mal con Alberto Nisman porque yo insistía en que viaje a una reunión de Interpol para mantener las alertas rojas de los acusados iraníes por el atentado a la AMIA. Él decía que no, y vino con Antonio Stiuso. Discutí más con Stiuso, que tenía la voz de mando. ¿Por qué vino Stiuso? Terminé convenciendo a Nisman de que viaje. Que se reúna en el hotel, pero que no hable por teléfono. En la reunión le fue bien, y él me lo reconoció. Yo tenía una excelente relación con Nisman”.