El caso es aberrante y salió a la luz de manera fortuita. Fue el año pasado. Una mujer de Comandante Andresito quiso ocupar el celular de su marido panadero para acceder a internet y se topó con videos en los que se veía al hombre abusando de una de las hijas de la pareja.
De inmediato, la madre de la nena acudió ante la Policía. Luego intervino la Justicia y en las últimas horas se supo que el expediente fue elevado a la instancia de juicio oral.
El juez de Instrucción Tres de Puerto Iguazú, Martín Brítes, fue quien dispuso la elevación, luego del requerimiento hecho por la fiscal Griselda María Blanca Moraes.
Ni la defensa oficial del acusado se opuso a que el expediente vaya a juicio por “abuso sexual agravado por el vínculo”.
El hecho sucedió en el barrio Quintas Altas y, de acuerdo con lo que establecieron los investigadores, además de violar de la pequeña que aparecía en el video (entonces con 11 años) también abusó de su otra hija de 14 años. Ambas declararon en Cámara Gesell y detallaron que los ultrajes venían desde hacía tiempo.
Una vez que la madre de las víctimas radicó la denuncia, el panadero intentó huir a una zona de monte, pero los efectivos de la Policía lograron capturarlo. Está preso desde entonces: septiembre de 2016. Y todo apunta a que pasará mucho tiempo entre rejas.