La ampliación fue presentada ante el juez federal Luis Rodríguez, a cargo de la causa, y, allí, los legisladores kirchneristas advirtieron que el funcionario “no sólo tiene la información antes que cualquier otro accionista, sino que es quien decide lo que sucede en ese mercado, definiendo políticas estatales que benefician o perjudican a la empresa anglo-holandesa de la cual es accionista”.
En el marco de este expediente, el ministro Aranguren fue denunciado por supuestas “negociaciones incompatibles” con la función pública en referencia a operaciones de compra de gas.
Los diputados sostuvieron que se habría dejado de importar gas desde Bolivia para optar por Chile a un precio superior, con miras a beneficiar a Shell.
“El interés del ministro es que Argentina le compre a Chile el gas a 6,9 dólares antes que recibir en Bolivia los 3 o 4 dólares del contrato que Argentina tiene con ese país hermano y, así, poder venderle a esos ‘compradores’ el gas boliviano a 8 dólares”, sostuvo la denuncia.
Además, se explicó que el gas chileno “es de origen noruego y fue transportado desde el sur de Francia como Gas Natural Licuado en barco hasta la planta de regasificación de Mejillones, en la costa pacífica del norte de Chile”.
También, en la ampliación de la denuncia, los diputados Doñate y Tailhade remarcaron que “el valor de las acciones de la Royal Dutch Shell ha subido desde el 20 de enero del 2016 de 16,67 euros la acción hasta 22,88 euros la acción el día 10 de junio”.
“Si el Estado argentino favorece con todas sus políticas a la empresa Shell, y sus acciones aumentan de valor, en alguna medida es consecuencia lógica y natural de esas medidas”, concluyeron.