Adele es una cantante que ha plasmado en sus canciones todas las penas y amarguras que ha tenido que vivir en el amor, y hoy la cantante británica contó otra de sus más grandes adversidades: tuvo que luchar contra una fuerte depresión postparto.
Hace cuatro años tuvo su primer hijo, Angelo, cuando estaba en medio de una carrera exitosa a nivel mundial. Durante una entrevista para Vanity Fair le preguntaron si volvería a tener hijos, planes que ella no cree llevar a cabo “Tengo demasiado miedo, tuve una gravísima depresión postparto luego de que tuve a mi hijo, y me aterró”, confesó a la revista.
“Mi conocimiento del postparto, o post natal, como se dice en Inglaterra, es que tu no quiere estar con tu hijo; te preocupa de que puedas dañarlo; te preocupa que no estés haciendo un buen trabajo. Pero estaba obsesionada con mi hijo. Me sentía muy insuficiente; sentía que había hecho la peor decisión de mi vida”, contó la cantante de “Hello”.
Durante ese momento no tomó antidepresivos, ni tampoco habló con nadie del tema, excepto con un grupo de madres embarazadas y con hijos.
Finalmente decidió darse un tiempo a solas cada cierto tiempo por salud mental y sentirse mejor ella misma.
“Eventualmente me dije ‘me voy a dar una tarde por semana para mí misma, haré todo lo que yo quiera sin mi bebé'”, siendo una decisión muy cuestionada por sus amigos que le preguntaron si es que no se sentía mal por hacer eso. “Les decía, sí, me siento mal, pero no tan mal como me sentiría si no lo hiciera (..) Te hace mejor mamá si te das un buen tiempo para tí misma” contó la cantante.