De esta forma, desplazó a Beyoncé, quien aparecía como la gran favorita con nueve nominaciones y terminó la noche con dos estatuillas: una por mejor álbum urbano contemporáneo por Lemonade y otra por mejor video musical por Formation).
Por su parte, Bowie, fallecido en enero de 2016, se llevó los cinco premios póstumos a los que había sido nominado: mejor canción rock (“Blackstar”), mejor actuación rock, mejor álbum de música alternativa, mejor diseño de empaque y mejor ingeniería musical en un álbum de música no clásica, todos ellos por su último disco de estudio, “Blackstar”, el número 25 de su carrera.
El de Brixton no se hacía con un Grammy desde que en 1984 lograra el premio al mejor video en formato corto, por “Jazzin’ for Blue Jean”, recordó la agencia española Efe.
Otro nombre destacado de la entrega de premios en el Staples Center de Los Ángeles fue el de Chance the Rapper, que se alzó con los Grammy al mejor artista novel, mejor álbum rap (“Coloring Book”) y mejor actuación rap (“No Problem”, junto a Lil Wayne y 2 Chainz).
Diego Torres y Dante Spinetta y Emmanuel Horvilleur con Illya Kuryaki & The Valderramas representaron a la música argentina, aunque no pudieron obtener un gramófono en sus respectivas categorías (“Mejor álbum de pop latino”, por “Buena vida”, y “Mejor disco de rock latino”, por “La humanidad o nosotros”).