Los laboratorios y el PAMI acordaron que a partir del 1° de abril reducirán el precio de los medicamentos en un 5 por ciento en relación al valor que tenían a fines de febrero. Según el entendimiento al que habrían llegado con la Cámara Industrial de Laboratorios Farmacéuticos Argentinos (CILFA) también habrá limitaciones para los aumentos futuros a un 70% de la inflación durante el año que viene, como también habrá topes a algunas marcas específicas.
Hace una semana la obra social de los jubilados selló un pacto con los laboratorios extranjeros con filiales locales, quienes se comprometieron a establecer “precios tope” para todo el 2018 y aseguraron que no los modificaran. Este convenio tendrá solo un año de vigencia, aunque aseguran que es un punto de partida.
Hay un detalle del acuerdo que señala el diario Clarín: la chance de que los precios que se venden al público para el PAMI sean distintos a los que se apliquen para las obras sociales. Según la cláusula, será potestad de cada laboratorio poner precios iguales o diferentes.
Ahora definirán la letra chica, ya que el “trazo grueso” ya está ultimado. Los laboratorios se comprometieron a informar cada uno de los precios con los que saldrán al mercado de las drogas que comercialicen en el PAMI.
Según publicó La Nación, el nuevo convenio instaura un tope de incremento de precios de hasta un 70% sobre la suba de la inflación que haya que incluye ajustes trimestrales y el citado descuento del 5 por ciento sobre los precios de fines de febrero.
Los nuevos valores surgirán de un promedio que se da entres los medicamentos más baratos y más caros de la droga que se venda. Entre las diferentes marcas y tamaño que haya surge, a través de una fórmula técnica, el precio por miligramo.