Siempre ha estado presente en decoración, puede que relacionado con ambientes juveniles, descomplicados, y con interiorismos de corte étnico en los que cojines y almohadones tenían un papel protagonista. Sin embargo, amueblar con pufs originales cualquier estancia es hoy una tendencia muy actual en todos los estilos decorativos.
Para que no te quede ninguna duda, aquí tienes algunos modelos que te van a encantar. Muy diferentes entre sí, cada uno de ellos es capaz de poner un toque personal al espacio. Eso sí, todos comparten una cosa: resultan prácticos y muy cómodos. ¿Quieres uno?
Pufs originales: el elemento más versátil
Puede que nunca te hayas planteado poner un puf en tu salón. Quizás no te resulte el elemento más adecuado para sentarte, o creas que no va contigo ni con tu estilo de decorar. Pues bien, seguro que después de leer este post vas a tener tus dudas, porque quiero mostrarte algunos pufs originales capaces de cambiar tu opinión sobre esta pieza tan especial.
La mayor ventaja que te ofrece tener un puf (o varios) en casa es, sin duda, su versatilidad. Igual te sirve para sentarte en el salón junto a la mesa de centro que para utilizarlo como improvisada, pero muy práctica, mesita de noche. Y eso es algo genial, sobre todo en las casas de hoy día en las que el espacio no abunda. Incluso hay pufs cuya tapa se levanta para poner a tu disposición un espacio de almacenaje extra que siempre viene bien.
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¿Qué tienes invitados por sorpresa y no cuentas con asientos para todos? Ahí está el puf para echarte una mano. ¿Qué necesitas una mesa auxiliar? Lo mismo. No me digas que no le ves ahora el encanto a los pufs…
Además, como existen modelos tan diferentes en cuanto a forma, color, material y diseño, puedes elegir el puf que más va contigo o con el ambiente en el que lo quieres integrar.
Un puf que sirve de mesa auxiliar
Como comentaba antes, esta forma de utilizar los pufs originales me resulta muy práctica, aunque no todos los pufs sirven para ello. Para que te puede servir de mesa, el puf ha de tener una forma más o menos geométrica (que puede ser cuadrada o rectangular). Evidentemente, los pufs más “blandos” no son adecuados para este uso.
Pero si tienes uno de estos pufs originales tapizados en tela (o en piel de vaca como el de la imagen) no te prives de ponerlo delante del sofá. ¡Te quedará genial!
Úsalo en el dormitorio
Pero los pufs originales no solo quedan de cine en el salón, a modo de asiento auxiliar junto al sofá o delante de la mesa de centro. Los dormitorios son también uno de los lugares de la casa en los que más te lucirá un puf y donde podrás sacarle más partido.
Ya sabes que puedes utilizar tu puf como mesilla de noche para poner el despertador o el libro que estás leyendo. Pero también puedes usarlo a modo de descalzadora, colocado a los pies de la cama o en un rincón de la habitación. Otro de los usos que puedes darle a los pufs es para dejar preparada la ropa que vas a ponerte al día siguiente, o para dejar la ropa que te quites por la noche.
También para la terraza
A estas alturas seguro que ya eres fan total de los pufs originales de los que hablo, ¿verdad? Y eso que todavía no los has probado… En cuanto te des cuenta de lo cómodos que son, no podrás estar sin uno de ellos. Y, llegado el momento, lo querrás tener hasta en la terraza.
¡No hay problema! Hay modelos perfectos para poner en el porche o la terraza, e incluso en el jardín. Solo has de buscar los modelos adecuados, fabricados con materiales que puedan mojarse sin estropearse y que resistan la acción de los rayos solares. ¡A disfrutar se ha dicho!
Muchas opciones para elegir
Aunque yo quería hablarte de 6 modelos de pufs originales, lo cierto es que hay muchos más. Sin embargo, estos me parecen realmente geniales. Lo bueno de elegir un puf para tu casa es que tienes un interminable abanico de opciones entre las que escoger.
Entre los pufs que más me gustan están los fabricados en punto, como si hubieran sido tejidos con grandes agujas y una lana gruesa y esponjosa. Los encontrarás con una forma más compacta o regular, o mas “blandos”. Todos son geniales.
También los confeccionados de tela, cuadrados, como si se tratara de grandes cojines sobre los que sentarse en el suelo.
O también los modelos tapizados con telas texturizadas, con pieles sintéticas o con tejidos de diseños étnicos o estampados geométricos. O lisos, ¿por qué no? Elige el modelo de puf que más te guste y disfrútalo a tu manera.
Por Monica Corredera