El ministro de Hacienda y Finanzas, Nicolás Dujovne , también licitará dos bonos en pesos por el equivalente a 4000 millones de dólares. Con eso buscará descomprimir la renovación de las Lebac (514.000 millones de pesos; unos 17.000 millones de dólares) para evitar que siga la desconfianza e incertidumbre que reina desde mayo.
Tras los cambios en el equipo económico (de lo que se informa aparte), Dujovne concretará una colocación de los bonos en pesos y dólares a tasa fija con vencimientos previstos para el año próximo y otra, pero solo en pesos, a tasa fija con vencimiento recién en 2020.
Procurará, en rigor, disipar temores de que los inversores se trasladen de las Lebac al dólar y generen nuevas presiones sobre el Banco Central que hagan subir el tipo de cambio, que el viernes cerró en alza en 28,85 pesos por dólar.
El Gobierno busca así 72 horas de tranquilidad cambiaria para evitar presiones que obliguen al flamante presidente del Banco Central, Luis Caputo , a intervenir con reservas en el mercado. Si resiste la presión hasta el miércoles, tendría parte del trabajo hecho.
Ese día se firmará el acuerdo con el FMI y llegará el primer giro de 15.000 millones de dólares. La mitad, 7500 millones, serán para reforzar las reservas del Central, y otro tanto irá al Tesoro que lo venderá vía licitación por medio del Banco Nación y lo convertirá en pesos para cubrir gastos corrientes.
Esa inyección de dólares, según la Casa Rosada, debería descomprimir el tipo de cambio y la apuesta de máxima de Macri es que el dólar baje un poco.
Si el Gobierno logra estabilizar el tipo de cambio, Dujovne y Caputo podrían anunciar nuevas medidas para calmar a los mercados. Será una semana muy movida.
Las Lebac
Una de las opciones que se analiza sería una leve baja de la tasa de interés de las Lebac, o de política monetaria, hoy en el 40%.
Pero también Macri busca infundir mayor confianza en la economía real con el nuevo anuncio de cambios en el Gabinete conocido anoche cuando la Casa Rosada informó los cambios de ministros: Dante Sica reemplazará a Francisco Cabrera en Producción y Javier Iguacel sustituirá a Juan José Aranguren en Energía.
“Habrá muchas acciones simultáneas dirigidas a generar previsibilidad y calmar a los mercados”, dijo a LA NACION un alto funcionario de Macri. “La principal apuesta apunta al miércoles cuando llega parte del crédito stand-by del FMI. Con esos 7500 millones de dólares habrá una fuerte inyección de dólares en un momento importante, que busca dos cosas. Bajar el tipo de cambio y ver qué pasa el jueves con el dólar y cambiar las expectativas”, señaló otra alta fuente del entorno presidencial.
“La misma expectativa de esta baja, que el mercado la descuenta, hace que no debería haber presión sobre el dólar. Pero, además, se licitarán dos bonos para neutralizar el canje de Lebac y que los inversores no vayan al dólar sino a los bonos en pesos con buen rendimiento”, señalaron.
La posibilidad de bajar la tasa de interés de las Lebac, que se estudia en el Gobierno, está en duda porque podría actuar en contradicción con ese objetivo. Incentivaría a los tenedores a salirse de esos instrumentos para irse al dólar, y podrían hacer subir la divisa, a menos que sean absorbidos por los bonos.
Entre los consultores privados se estima que una parte de las Lebac se renovará, la otra irá a los bonos y otra podría incidir en el mercado cambiario. El Gobierno espera así minimizar el traslado al dólar y recuperar la calma para encarar nuevas reformas.
En paralelo, Macri buscará instalar una agenda positiva de crecimiento, desarrollo productivo y promoción a las pymes y a la exportación.
De allí los nombramientos ayer de Sica al frente del Ministerio de Producción y de Iguacel a cargo de la cartera de Energía.
Sica es un experto en industria y comercio exterior, muy escuchado por Macri. Iguacel está considerado por el Presidente como uno de los mejores en la gestión de obras públicas viales.
Con esas medidas estaría lista la reestructuración del área económica, aunque en el Gobierno no descartan más movimientos en un Gabinete que supera los 20 ministerios y que debe dar señales urgentes de austeridad.