La compañía anunció este martes que comenzaría a probar un nuevo límite de 280 caracteres para todos los idiomas excepto japonés, chino y coreano.
El cambio sólo será visto por un pequeño porcentaje de usuarios de Twitter en un primer momento antes de que sea potencialmente disponible ampliamente.
La medida dará a los usuarios de Twitter más libertad para expresarse, facilitando uno de los aspectos más difíciles de usar el servicio que ha luchado para aumentar su audiencia en los últimos años.