Tiene 36 años, tres esposas, ocho hijos y una de las fortunas más abultadas del mundo: cinco veces más grande que la de la Reina Isabel II de Inglaterra.
Tamin bin Hamad, el joven Emir de Qatar que se reunirá con el presidente Mauricio Macri esta noche en Olivos, asumió su cargo en 2013 luego de que su padre abdicara sin razón aparente. Un estricto protocolo rodea todos sus movimientos y su vida cotidiana.
Hammad es el cuarto hijo varón del jeque Hamad bin Jalifa Al Thani y de su esposa favorita, la bellísima, elegante e influyente -también a nivel político- jequesa Mozah. Nació el 3 de junio de 1980 en Doha y estudió en los colegios privados más prestigiosos del Reino Unido y en la Academia Militar de Sanhurst. Una de las tres mujeres con las que está casado es su prima.
Llama la atención de muchos su rápida llegada al poder, sobre todo porque tiene tres hermanos mayores que abdicaron para dejarle el trono. “Las dos anteriores generaciones habian llegado mediante ‘golpes palaciegos’ porque era necesario modernizar el sistema politico”, explicó el especialista Darío D’Andreas, autor de Secretos Cortesanos.
“El emir Hamad derrocó a su padre en 1995 con la ayuda de la corte porque estaba, de alguna forma, estancado en el pasado. Ahora en el año 2013 Hamad abdicó para asegurarse de que el trono estuviera ocupado por un joven y también para asegurarse de que no le pasara lo mismo que a su propio padre”, contó.
Más allá de la política, Hammd tiene intereses en los deportes y en los negocios. Es dueño de la cadena de Al Jazeera, de la tienda Harrod´s, del estudio de Miramax y de un porcentaje de Volkswagen y de Louis Vuitton.
Además preside el Comité Olímpico de su país, es dueño del club de fútbol Paris Saint-Germain y es quien logró algo que parecía imposible: que en el 2022 el Mundial de Fútbol se dispute en su país, un pequeño, próspero y desértico paraíso del Golfo Pérsico donde las temperaturas en julio superan tranquilamente los 40 grados.